lunes, 21 de julio de 2008







Historias de Santiago 2
"... Después de mi tortura de ir a la clase de física en la mañana de preuniversitario, después me dirigiria al centro de Santiago a sacar unas pocas fotos para mi trabajo de artes. No iba muy contenta a Santiago, porque sabia que al llegar a la tarde a casa, llegaria mi ropa hedionda a smog, pero encontre el sábado que la gente caminaba muy amable y sus aspectos eran de chilenos relajados... eso ya me hacia andar un poco más contenta por Santiago. Hasta cuando encontre en el paseo Ahumada que ¡estaban regalando abrazos!... Eran algo de 10 o 15 jóvenes regalando abrazos, de los que me contagiaron con su alegria y entrega y recibi uno... a una de las niñas les pregunte ¿porqué todo esto? y me contestaron: para que tengas un buen día. Tenian razón. Pasos más allá me reia sola, y era porque gestos así, tan humanos entre personas igual que tú, te hacian pensar que todo no es tan malo y frívolo, que si se pueden encontrar actos sin lucro...
Más allá, al frente de la Catedral y de la oficina central de Correos de Chile, estaba el tipico show de un artista callejero... no me gusto mucho su performance, porque usaba muchos garabatos, siendo que habian niños viendo su espectáculo, a pesar de que su humor era bueno. Después me fui a la moneda a fotografiarla, y como siempre, una manada de orientales fotografiandola también. Luego, le pregunte a un señor de un negocio de dulces y periódicos donde más podia encontrar lugares historicos. Muy simpático y agradable el caballero, me hizo acordarme de muchos lugares. También llegue hasta la Universidad de Chile, la fotografie también, la estaban reparando... Como último destino le saque fotos a la Catedral y su interior y al Correo. Me encontre con un payaso medio triste, con una personificación de una estatua que hacia de personaje de minero. Todavia me acuerdo cuando aquella estatua me sacó la lengua para fotografiarla. Me dió mucha risa la buena intención de la estatua, a pesar de que no andaba con monedas para dejarle en su sombrero...
Al final, pase a revelar mis fotos al Florida Center y quede muy contenta por los ángulos de las fotos que tome.
A pesar de haber llegado muy cansada ese día, a la noche me esperaba una tocata... Debia ir. Debia conocer aquel tan renombrado barrio Bellavista. Me parecio bohemio y extremo. Pero creo que con la compañia de un novio, pasear por allí, no seria romántico, pero muy grato. Ah! pero sin olvidar, una música de fondo acorde. Como por ejemplo, la del bar que me tocó ir a mi. Un tributo en vivo a Coldplay de lo mejor

=)